La fiscalía de la capital italiana pidió enjuiciar a la alcaldesa de la ciudad, Virginia Raggi, por falso testimonio en un caso de corrupción, aunque desestimó la acusación de abuso de funciones en contra de la política del partido Movimiento 5 Estrellas.
Los fiscales de Roma pidieron procesar a Raggi, que en las elecciones de junio de 2016 ganó con casi el 70 por ciento de los votos, por haber mentido en sus declaraciones en relación a la promoción de Renato Marra, hermano de su principal colaborador.
Raggi era también indagada por abuso de funciones, pero la fiscalía decidió archivar esa imputación. “Me entero con satisfacción que luego de meses de fango mediático sobre mí y sobre el Movimiento 5 Estrellas, la fiscalía de Roma decidió hacer caer las acusaciones de abuso de funciones”, fueron las primeras palabras de la alcaldesa a través de Facebook.
Reiteró que durante meses los medios de comunicación la han presentado como “una criminal” y se dijo convencida que próximamente será aclarada igualmente la acusación de falso testimonio.
Esa última imputación tiene que ver con el hecho de que Raggi dijo a la autoridad anticorrupción no haber consultado al que era su principal asesor, Raffaele Marra (detenido por corrupción en diciembre pasado) para promover en un cargo en el ayuntamiento a su hermano Renato.
Sin embargo, medios locales publicaron las pruebas de que ello no había sido así. En tanto, el cómico Beppe Grillo, fundador del Movimiento 5 Estrellas, se dijo contento de que la principal acusación contra Raggi, la de abuso de funciones, haya sido desestimada. Elegida con una mayoría aplastante en las elecciones de 2016 como primera alcaldesa en la historia de Roma, la popularidad de Raggi actualmente está por los suelos y según los sondeos el 68.2 por ciento de los romanos consideran muy mala su gestión.
