A partir de un caleidoscopio de color y escenas cotidianas sobre la Ciudad de México y de lugares aledaños a ésta, el artista francés Nicolás de Crécy creó la exposición “Nicolás de Crécy. Bitácora mexicana”, la cual permanecerá hasta el 29 de octubre en el Museo de Arte Moderno.

Resultado de la experiencia que tuvo el artista durante un recorrido de 45 días por México con el auspicio de la Casa Louis Vuitton en 2014, “Bitácora de color” representa en opinión de la curadora Sofía Neri, una oportunidad para reencontrarse con la belleza de nuestro entorno en tiempos difíciles, informó la Secretaría de Cultura federal.

“De Crécy realizó 100 acuarelas durante esa residencia y escogimos 66 para esta exposición. Nicolás de Crécy ha trascendido a las artes visuales debido a su pericia narrativa, plástica y técnica. En esta serie el público descubrirá que la precisión de sus trazos, combinado con la delicadeza de la acuarela transmiten variaciones anímicas en las atmósferas, así como gran emotividad”.

Dicho recorrido abarcó diferentes puntos de la Ciudad de México, como las colonias Tabacalera, Santa María la Ribera, San Rafael, Juárez, Roma, Polanco, Santa Fe, Centro Histórico y Coyoacán.

Así como lugares específicos como la iglesia de San Miguel Tzinacapan, la Pirámide del Sol en Teotihuacan, la Catedral Metropolitana, el Ángel de la Independencia, la Parroquia de Nuestra Señora de la Natividad y la carretera 175 entre Oaxaca y Puerto Ángel.

Entre las obras que integran la exposición, se encuentra la pieza titulada “Vista de la ciudad”, en la que se observa la urbe iluminada de noche con grandes edificios como la Torre Mayor o la Torre de Pémex, mientras en la acuarela “Piñata”, puede verse a una familia a bordo de un auto compacto, transportando en el techo una colorida piñata casi tan grande como el vehículo.

Otra obra emblemática que comprende la muestra es “Alrededores del metro Allende”, en la que se aprecia a los transeúntes, un microbús que va a San Lázaro, un perro que cruza y voltea hacia un motociclista y un puesto de periódicos con los titulares del día.

En la acuarela “Colonia Condesa” aparece como punto central un puesto de gorditas, sopes y quesadillas, así como varios clientes esperando sus órdenes, en la que también destaca un trovador con sombrero que toca frente a un pequeño tanque de gas y luce un sombrero de copa adornado con una cinta con motivos patrios.

Además, en la muestra se presenta un audiovisual en el que el propio Nicolás de Crécy describe su gusto por viajar sin prepararse y convertir su mirada en un instrumento virgen para absorber todo lo que lo rodea en cada país.

“Descubrí la Ciudad de México en forma intuitiva. Es una ciudad sumamente rica y orgánica. La luz, los colores y la arquitectura barroca son extraordinarias. Es una ciudad paradójica donde cohabitan los opuestos, de igual manera que en mi propio universo”, señala el artista.

La exposición “Nicolás de Crécy. Bitácora mexicana”, se exhibirá hasta el 29 de octubre en la Sala Gamboa del Museo de Arte Moderno, ubicado en Avenida Paseo de la Reforma, en horarios de martes a domingo de 10:15 a 17:30, bajo el costo de 60 pesos, y entrada es libre el domingo.

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